Hay gente que dice que con estos temas se tapa lo importante que está pasando y que, nosotros, los ciudadanos comunes, desconocemos y lo haremos por siempre jamás.
En nuestro país (Sudacaland) hay muchas urgencias, demasiada necesidad urgente insatisfecha.
Hablar, en este entorno, de los derechos de los homosexuales, pareciera ser de una frivolidad de legislador suizo. Sin embargo, detrás de lo urgente, está lo importante. (No le quito trascendencia a lo urgente, no.)
En el año
Osvaldo enfermó de cáncer. Luciano veló por su pareja hasta el momento de su muerte.
Hasta tuvo que pedir dinero a su familia en Brasil, para costear el tratamiento.
Con la muerte de Osvaldo, “aparecieron” después de muchos años, sus parientes del campo (primos, tíos), gente de buena posición económica. Lo primero que hicieron fue internar a su madre en un geriátrico y poner de patitas en la calle a Luciano.
El próximo paso es declarar insana a la señora y proceder con la sucesión.
El bien en cuestión es un departamento de monoblock perdido en
Ahora bien, con una mano en el corazón: ¿Para Luciano no era urgente desde hace mucho tiempo la legalización del vínculo?
Hay cosas urgentes, lo sé.
Pero hay DERECHOS muy básicos que son mucho más que urgentes si alguna vez decidimos seguir creciendo como sociedad.
1 comentario:
Es muy cierto
Estoy en un todo de acuerdo con vos
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