lunes, 30 de agosto de 2010

Yo tenía razón



Desde que lo ví, tan pulcrito, tan objetivito, tan novio ideal para las hijas del barrio, no pude evitar la comparación con alguien a quien detesto desde que tengo uso de razón, el hijo de mi madrina.

Era al candidato número uno a reemplazar junto a Debora Perez Volpin a la dupla Cahen Dánvers / Mascetti en la conducción de Telenoche. Luego -ante el zarpazo de Biasatti y la esposa del dire de noticias del trece, Ma. Laura Santillán, se tuvo que conformar con el premio consuelo: el noticiero del mediodía.

Parece ser que de tan pero tan agradecido al grupo empresario, se pasó de ponerse la camiseta al fanatismo más deleznable: Dicen que hace unos días entré al estudio vociferando a los técnicos y productores del ciclo sobre de qué lado había que estar para no sufrir consecuencias.

El pulcrito mostró los colmillos.

Yo tenía razón.

viernes, 27 de agosto de 2010

Recomponiéndonos






Hay que pasar por los trances, amigos. Los malos y los otros. El tiempo es inexorable, el aquí y ahora no es más que una mentira convencional. Vaya descubrimiento, dirán Ustedes.

No por repetido, deja de ser cierto.

Aquí estamos nuevamente para pelear, para reir, para discutir, disentir, polemizar, enojarnos, encontrarnos. Eso: encontrarnos. En lo posible, por nuestra salud mental, de verdad, más allá de lo virtual.

Acompañarnos, claro. Para que nuestras vidas no sólo transcurran. Para compartir entrada a entrada palabras nacidas desde lo más hondo de nuestro corazón.

Es por eso que en los tiempos que vivimos los comentarios a nuestros escritos se hacen tan necesarios. Tan vitales. No sean vagos, escriban aunque sea dos palabras. Para nosotros son mucho más que eso.

Antes de dejaarlos por hoy, les paso el link a mi colaboración en La Isla Tuerta. Se trata de un pequeño vídeo que perpetré para dar a conocer nuestra Argentina.

Un abrazo.




Foto: fotonaturaleza.org

domingo, 22 de agosto de 2010

De blogs y sentimientos


Si bien a uno le parece muy sencillo el tema de escribir o participar comentando en un blog, hay sensaciones o sentimientos que parecen ir más allá del proceso de la comunicación.

En mi caso, soy muy cuidadoso de los blogs que forman parte de mi lista de Nexos, pues se supone que es una recomendación de lectura de los mismos a los que se acercan a nuestro sitio.

Pero también forman parte de algo que llamo una red de personas que intentan aportar algo más que fotitos personales para que los demás den su opinión.

Personas que sienten necesidad de decir lo suyo. En ese sentido son una herramienta invalorable.

Pero uno encuentra sorpresas, coincidencias, valores, sentimientos que comparte. Lectores que se bancan las discontinuidades del autor y estimulan la vuelta por puro sentimiento.
Lectores que te acompañan en momentos de zozobra.

Hoy, me toca sentirme muy mal y compartirlo con Ustedes, por la inmensa pérdida sufrida por un bloguero amigo, el Gato Vagabundo.

Quizás no sirva de mucho, pero es una manera de acompañar.

Un abrazo, amigo Gato.

viernes, 6 de agosto de 2010

Las torres de Nuremberg


Desde hace un largo tiempo estoy en la búsqueda de un ejemplar del libro "Las torres de Nuremberg" de José Sebastián Tallón (Edición Ilustrada de Kapelusz).

Les cuento: Cuando estaba en tercer grado (pleistoceno medio) mi maestra lo trajo al aula y me cautivó. Tiempo después entre como mi vieja y mi tía Pame no lo encontraron, mi maestra, me lo regaló.

Era una mezcla de poesías con dibujos propios del autor que me pasaba horas y horas leyendo y releyendo. Una belleza de libro.

Como suele suceder, con los años, desapareció. Quizás prestado...

En el 2002, conseguí una versión actual de los poemas del libro en rústica, sin las ilustraciones. Pero, muero por tenerlo un par de horas en mis manos... (aunque sea el tiempo para escanearlo).

A ver si aparece alguien de mi época que me haga la gauchada.

Internet es mágica. Hacé tu hechizo, dale.



Foto: www.cuatrogatos.org

UFA


No sé si le pasa a más usuarios de Blogger, pero -últimamente- no me es posible publicar comentarios en otros blogs.
Encima, he descubierto que soy más constante como comentarista que como autor...
¿A Ud. le pasa lo mismo que a mí?